Por Marina Rossi / Sociedad / El País

"La modelo Maria Julia de Araújo, de 19 años, no alcanza el metro y cincuenta de estatura, muy lejos de los estándares de las pasarelas. No tiene el cuerpo esbelto y delgado que exhiben las top models de todo el mundo. Tiene el pelo largo y liso, ojos marrones almendrados y una sonrisa fácil. Aun así, Maju [se lee Mallú, en portugués] se ha convertido en modelo internacional. Ya ha desfilado en tres semanas de la moda, incluida la de Milán, y es la nueva embajadora de la marca L'Oréal Paris. La modelo, que tiene síndrome de Down, tiene una intensa agenda de trabajo, pero dice que tantos compromisos la cansan "solo un poco". Se encuentra con EL PAÍS al lado de su madre, Adriana de Araújo, y su hermana, Larissa, en el centro cultural Espacio de las Artes, zona sur de Río de Janeiro, ciudad en que vive con los padres y sus dos hermanas. Ante el fotógrafo del reportaje, abre rápidamente los hombros, estira la espalda, deja la boca entreabierta y posa para la cámara. Los tres años de profesión la han acostumbrado al objetivo. Pero el mundo todavía tiene que acostumbrarse a ella".






Imagen: João Laet / El País
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