Por María Bellmonte / El Mundo

"¿Por qué llevamos bragas a todas horas? ¿Estaríamos mejor sin ellas? Hay quien defiende que prescindir de ellas incluso es empoderador. Desafiamos los propios prejuicios para comprobar si merece la pena prenderles fuego".


Artículo Anterior Artículo Siguiente