Por Xavier Mas De Xaxàs Faus /
En Magazine - La Vanguardia
Juli Capella es un arquitecto con muchas ideas y poco ego, algo difícil en una profesión compleja que a veces se escora a hacia la altisonancia, descuidando la funcionalidad y el respeto a las personas que la utilizan.
Capella es un humanista. El individuo siempre ha de estar en el centro de las cosas, lo que también supone estar en el centro de las ciudades. Barcelona ensaya un urbanismo táctico para adaptarse a la pandemia y Capella cree que está muy bien. Es posible que las decisiones no sean las adecuadas, pero la intervención en el espacio público es necesaria para conseguir una ciudad más humana y menos contaminada, más sostenible y menos congestionada.
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