Por Mayra Paterson / Cuerpomente
"[…]
"Difícilmente dejaremos de buscar afuera sin resolver antes el enigma que hay adentro".
[…]
Cuando descubres lo poco que te conoces y lo alejado que has vivido de ti mismo, la vida pega un vuelco y todo adquiere un nuevo significado y propósito: el trabajo, las relaciones, etc. Vivir plenamente requiere descubrir que la vida no es algo que tenemos, sino que somos vida.
[…]
Las emociones también podemos aprender a sentirlas en vez de a padecerlas.
[…]
La presión social por estar bien responde a un miedo colectivo a contactar con el malestar. Esto nos vuelve a todos un poco "cómplices" del malestar, pues al ocultarlo se magnifica.
La clave está en dejar de ocultar el malestar y empezar a reconocerlo sin juzgarlo como algo inaceptable, trágico, "impropio de mí", etc. Esa parte de nosotros capaz de reconocerlo como tal es muy lúcida.
Una vez hecho esto, lo mejor es buscar ayuda en alguien que ya haya atravesado el camino del malestar. Te ahorrará mucho tiempo y confusión.
[…]
Todos tenemos un tipo de inteligencia intuitiva que apenas utilizamos o que simplemente ignoramos. Cuando practicas el silencio activo, descubres que en ti hay una voz que te habla. Es una voz sentida, no intelectual. Podemos aprender a escuchar ese tipo de señales internas".
Image: Cuerpomente