Por Luis Alemany / El Mundo
"Växjö (Suecia), 1961. Escritor. El mundo lo descubrió por 'El abuelo que saltó por la ventana y se largó', comedia negra con millones de lectores en todo el mundo. Su nueva novela se llama 'Una dulce venganza' (Salamandra).
[…]
Lo que quiero decir es que olvidamos todo el tiempo. Olvidamos de lo que pasó en los años 30, olvidamos que en Berlín se quemaba arte y libros... Y luego están las redes sociales que, por su estructura, tienden a la solución fácil. Las ideas complejas caben mal en 140 caracteres, así que todo se simplifica y se reduce en un a favor o en contra.
Se supone que el humor nos salva del dogmatismo y la tiranía. Pero creo que Stalin tenía sentido del humor. Y puede que Franco también lo tuviese a su manera. Y Mussolini.
El humor no es la solución, el mundo es una porquería a pesar de que seamos personas graciosas. La relación es la contraria: porque el mundo es una porquería inventamos el humor, para consolarnos".
Image: Getty / El Mundo