Por Fernando García / La Vanguardia
"Javier Arrés, ilustrador de toda la vida y criptoartista pionero, se desayunó ayer con el aviso de un coleccionista que le compraba dos tuits por 688 dólares cada uno. La transacción se realizó con criptomonedas de Ethereum (ethers), una de las principales plataformas digitales de transacciones sin intermediarios o blockchain. Arrés, ganador de la Bienal de Arte de Londres del 2019 en la categoría de trabajos en papel, se vio gratamente sorprendido por la compra de esos dos tuits relacionados con el anuncio de venta de una de sus obras. Pero su sorpresa no era absoluta. Afirma que su incorporación al criptoarte a través de los activos digitales NFT (Non Fungible Tokens), cuya principal virtud es que aseguran la autenticidad y titularidad de una obra sin margen de error o copia, ha disparado su cotización como artista y cambiado su vida.
¿Cómo? Por la misma razón por la que el pasado miércoles la casa de subastas Christie´s vendió una obra digital del artista Beeple por la friolera de 58,5 millones de euros. Y es que el nuevo sistema de verificación, compraventa y rastreo digital de todo tipo de obras de arte y contenidos creativos abre unas posibilidades de inversión y por supuesto también de especulación que están sacudiendo esos mercados y, tal vez, abriendo nuevos paradigmas en el mundo de la cultura".
Image: Javier Arrés / La Vanguardia